Hoy es un día muy especial.
Hace un año yo estaba a punto de explotar, salida de cuentas hacía casi una semana y con un montón de contracciones a todas horas desde entonces. Y ella no acababa de querer salir. Parecía que estaba a gusto en mi tripota. Y yo estaba deseando verle por fin la cara y abrazarla. Y presentarsela a su hermano, que se iba a hacer hermano mayor!
Al final el día 12 sobre las 5 de la mañana rasgó la bolsa y con eso me dijo "prepárate, que ya voy". Y todo nos pusimos en marcha para esperarla. Un parto genial, con la misma matrona que nos atendió en el parto de Unax a nuestro lado, y que le dejó a Jonathan que fuese él mismo el que la sacase de mi. Gracias Isabel, nunca te vamos a estar suficientemente agradecidos.
Y en un segundo estaba ahí. Mirándome y cogiendo color por segundos (nació con una vuelta de cordón al cuello y un poco morada, como su amatxu). Y se enganchó a la teta en cuanto tuvo oportunidad, igual igual que su hermano. Y así seguimos hoy. Enganchadas la una a la otra. Pero ha pasado un año, y evidentemente ya no es ese bebé que conocí aquel día. Es una niña. Aún muy pequeña, pero una niña. Con su carácter, su forma de comunicarse con gestos y medio-palabras, con ese cuerpecito redondito y esa mente inquieta...
Estaba yo pensando en eso mismo, en lo rápido que crecen mis dos peques, y creo que estaría chulo hacer una lista de las cosas que me gustan de cada uno de ellos en cada uno de sus cumpleaños. Si este blog se mantiene (y espero que sea posible), podré ir viendo la evolución de cada uno reflejada. Como mis listas podrían ser interminables, voy a poner un tope de 20 cosas. Posiblemente se me queden cortas, pero así no me voy por las ramas, ya sabemos que cuando hablamos de nuestros hijos no tenemos límites.
Y con ésto me lanzo a por mi primera lista cumpleañera.