Con el juego del #ABCDlacostura que nos propusieron
Diario de Naii y
Cal Joan y más para Instagram, mi cabeza se llenó de un montón de ideas (más), para organizar mi cuarto de costura.
Tenía ganas de hacer un cuelgahilos, tipo el que hizo Naii en
esta entrada. Tenía un marco de fotos grande guardado para ese fin, pero no terminaba de ponerme a ello. Durante el juego, vi como otras costureras guardaban sus hilos en los cajones, clasificándolos por colores. La verdad es que yo lo tenía así pero en una caja con tan pocos compartimentos que tenía mezclados los verdes con azules, los rojos con los rosas, verdes con amarilos y demás... Y lo tuve claro: Tenía que despejar uno de los dos cajones de la mesa de coser para eso. Una vez lo vacié, y le metí diferentes cajitas, ordené todos los hilos y la cosa quedó así:
Estoy encantada con ello. Lo tengo justo a la derecha de mi máquina y lo dejo abierto cuando tengo que hacer mucho cambio de color. Y con esto he conseguido mantenerlo siempre ordenado, porque según acabo con un hilo va directamente a su compartimento, no acumulo en la mesa hasta que tengo 20 y me decido a abrir la caja para guardarlos...
Pero me faltaba el tema de las canillas. Hasta ahora las tenía en una caja del Lidl, donde me venían unas cuantas compatibles con mi máquina. Pero lo mismo que los hilos, eso de coger y dejar la caja cada vez que había que hacer un cambio... Desastre. Y además, era mucha caja para solo las canillas.
Pensé en comprarme una cajita cuadrada de esas en las que entran un montón de ellas, pero pensé que me sería mucho más útil si las tenía más a mano, y ésto es lo que se me ocurrió.
Cogí un corcho que tenía desde hace tiempo, Pintura blanca acrílica (por el contraste, para que se vean mejor los colores de los hilos), un pincelito, washi tape (el único que tengo), y unas "eles" con tope que encontré en los chinos.
Pinté la parte de abajo del corcho. No todo porque era muy grande y no era necesario. Lo hice a ojo, no se cuánto mide el total de lo pintado. Y clavé las eles en tres filas, enroscándolas, dejando 2,5cm entre cada ele (a lo ancho, para dejar sitio suficiente para colgar las canillas).
Luego decoré con el washi un poco a mi bola. (En estas fotos faltan algunas eles en la fila de arriba. Calculé mal y tuve que comprar otro paquetito)
Por detrás, las puntas sobresalen un poco, pero como queda contra la pared no se nota, y no es tanto como para que la dañe.
Una vez terminado, colgué el corcho detrás de la máquina, para tenerlo a mano siempre que necesite. Así tengo la zona de las canillas, y la parte de arriba me sigue sirviendo para colgar notas o chorraditas de esas que tengo por el cuarto.
Me encanta como ha quedado! Ha salido baratísimo, y lo he hecho en 20 minutos (más el tiempo de secado de la pintura).
¿Os animáis a haceros con uno? A mi me está facilitando mucho el trabajo. Ojalá lo hubiese hecho antes...
Por cierto, enlazo con
RUMS, que es jueves!!! (Menos mal que Octubre se pasó, me encantó el juego del #ABCDlacostura, pero me tenía absorbida!!!)