viernes, 30 de septiembre de 2016

Unax. 5 años!

Ayer fue otra vez el cumple de Unax, se me escapa el tiempo entre las manos y no me entero!

Cinco añazos! Y parece que fue ayer cuando nació. 

El otro día me encontré con la entrada del cumple de los 4 años... sin publicar :( Y tampoco lo hice con el cumple de Mae. Soy un desatre... en fin, un año no voy a retroceder, pero no quiero que se me pase este sin escribir unas palabras. Creo que no voy a hacer una lista como otras veces, simplemente voy a hablar de él, de mi chico mayor, como me vaya saliendo. 

Como os digo, ha hecho cinco años sin que casi nos demos cuenta, pero la verdad es que ha ido cambiando a pasos agigantados.

Sigue siendo un niño hipersensible. Todo le afecta un montón y a todo le da un millón de vueltas en la cabeza, incluso cuando nosotros no nos damos cuenta. Por eso tenemos que estar siempre atentos y con mil ojos, porque hay veces que dos meses después de haber vivido algo que le ha impactado lo saca después de haber estado todo ese tiempo rayandose y con pesadillas. Que puede ser algo tan simple para nosotros como una pelea en el patio que ni siquiera tenía que ver con él y en la que no estaba implicado, pero si a el le parece que ha sido algo injusto, se lo guarda ahí.

A finales de curso decidió cortarse el pelo, porque estaba hasta arriba de que todo el mundo le confundiese con una chica, y de que los que ya sabían que era un niño le hiciesen bromas al respecto. Fue un tema que le trajo de calle todo el curso pasado. Se resistió mucho a cortarse el pelo (siempre tuvo la libertad de decidir lo que quisiese), pero sabíamos que era algo que le pesaba y le hacía sentirse mal. Al final decidió de un día para otro cortar por lo sano y raparse, y creo que se quitó un peso de encima, porque desde entonces le vemos más seguro de si mismo. A mi me daba mucha rabia ver como le afectaba tanto y darme cuenta de lo intolerante que puede ser alguna gente con quien no sigue "la norma" y es diferente en algo, pero estoy super orgullosa de ver que aunque lo pasó mal, supo encontrar su camino y tomar su propia decisión para sentirse mejor.

Esa sensibilidad también le hace un niño super cariñoso. En cuanto te descuidas lo tienes enganchado a tu cuello dándote besos y abrazos, e incluso acariciándote cara con cara como si fuese un gato. Hasta por la noche necesita contacto y se agarra a quien tenga al lado como un oso (vaya calor da!)

Sigue necesitando atención casi constante. Si quiere jugar, quiere que estemos con el, incluso aunque tenga a su hermana como compañera de juegos el 95% de las veces. Nos quiere a nosotros.

Tiene una imaginación sin límites. De hecho el año pasado ya nos decía su profe, que tiene tanta, que muchas veces sus compañeros no "le pillan" y no saben de que habla... Y es que se inventa unos animales, lugares, juegos y demás, que no tengo muy claro de donde los saca, pero desde luego el tiene clarísimo qué es lo que se acaba de inventar, y te lo describe con pelos y señales si se lo pides. En eso, Mae es su mejor cómplice, porque no solo le sigue al fin del mundo, sino que se mete en su juego como si lo hubiese escuchado toda la vida.

Le encanta construir y "arreglar" cosas, y si le das una caja de cartón, unas tijeras y un rollo de celo es el niño más feliz del mundo. Hemos tenido la casa llena de cajas y cartones todo este verano, y todas le valían. De vez en cuando tenemos que pararle un poco para que se relaje, porque se despierta por la mañana con tantas cosas que quiere hacer en la cabeza, que pasa de una a otra sin acabar la anterior y se estresa de ver que no llega a todo lo que quiere.

Y es que el tiempo a él si que se le escapa de las manos. Cuando somos más pequeños parece que los días son más largos, que un mes es un periodo de tiempo larguísimo, y un año ni te cuento. Pero esto no parece que vaya con el. Se resiste a dormir siestas porque le da la sensación de que el tiempo no le alcanza. Se ha pasado toooodos los días del verano, cada vez que decíamos que había que ir a la cama, llorando y gritando "A la cama ya? Qué poca mañana!!!". Cuando ya empezamos a anunciar que volvíamos a la rutina y al cole la frase cambió por "Qué poco verano!!!". Y ahora andamos rascando hasta minutos a la mañana, para que se vista rápido y desayune pronto para que tenga al menos cinco minutos para jugar antes de ir al cole y pueda irse con la sensación de que ha tenido tiempo para él...

Es como un mono. Mi tximinito le llamo yo. Trepa y se cuelga de todo lo que puede, y va con una seguridad que asusta. Yo reconozco que para este tema prefiero que esté con Jonathan, porque yo le veo y voy perdiendo años de vida de contenerme grititos cada vez que le veo colgando por las alturas. Pero la verdad es que es algo que se le da bien. Y no suele arriesgarse si no se ve seguro con lo que hace.

Tiene respuestas de estas que te dejan con cara de idiota y descolocada. Esto en realidad lo considero una virtud, creo que tiene las cosas muy claras y te las suele argumentar, y esto hace que muchas veces te tengas que tragar tus palabras. Pero también hay veces que no tiene razón, y cada vez nos tenemos que currar más también nosotros nuestras propias argumentaciones, porque si no, no le bajas al tío del burro ni de palo! 

Lleva unos días como una moto. Principio de curso, cambio (otra vez) de profe, fin de sus apreciadas vacaciones, y otro hermano en camino... Pues estamos como estamos! 

Lo del curso se irá asentando. Le ha tocado una profe que parece majísima, de las que no están muy de acuerdo con inflarles a fichas y dan más importancia a otras cosas (bien!). Así que dentro de que no le hacía gracia volver a la rutina, creo que esto es algo que ya poco a poco se va a ir asentando.

Lo del nuevo hermano... bueno, pues supongo que tendremos que pasar todos por un proceso de adaptación a la nueva situación, pero creo que todo va a ir bien. Al menos estamos poniendo toda nuestra energía en ello. Ya le ha salido algún tic, pero creo que es por el cúmulo de cosas. Creo que poco a poco se irá relajando el asunto. Está muy pendiente de mi tripa. No tanto como Mae quizás, pero toda la actitud hacia Nur es positiva. Nunca ha hecho un mal comentario o ha demostrado celos todavía, sino todo lo contrario, todo el rato habla de lo que le va a enseñar. Y aunque después haya algún momento "crisis", no tengo la menos duda de que va a seguir siendo un hermanazo mayor, como ya lo es con Mae.

Mae está en proceso de adaptación al cole, y todos los días va animándole por la mañana (ella va feliz, pero que su hermano le de ese apoyo es una de las razones, estoy segura). Cuando sale va a buscarla a su edificio y la recibe con un abrazo. Va en el bus con ella porque ella le pidió sentarse con el y el dijo que si encantado, en vez de decidir que prefería ir con sus amigos... En definitiva, la cuida muchísimo.

En casa, como es normal, a veces se pelean. Sobre todo este verano que han pasado tanto tiempo juntos y que ella ya no es el bebé manejable de antes... Pero luego les ves como se abrazan y la complicidad que tienen y a mi se me cae la baba... Por eso se que con Nur también va a ser así. No me cabe duda!

Es un cocinillas. Le encanta comer, y supongo que eso influye. Pero es que le encanta meterse en la cocina a ayudarnos con la comida, y experimentar sobre todo con las salsas. Ahora, para todo lo que come, el tío está hecho un tirillas. Las mallas le quedan sueltas, no digo más! Jajajaja

Y este es nuestro niño grande! Parece que fue ayer cuando le vimos por primera vez y ya está así de enorme. Entramos en la etapa de los cinco años, y estoy deseando ver lo que nos depara este año!

Zorionak mi niño! Te queremos mucho!

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